LA SOPA BOBA ofrece un menú especial para celíacos

21 mayo, 2012198

El próximo 26 de mayo se celebra el Día Nacional del Celíaco y LA SOPA BOBA quiere que rendir un pequeño homenaje a todos aquellos comensales que padecen intolerancia permanente al gluten, proteína presente en algunos cereales. Fernando Limón, chef del restaurante, ha creado un menú especialmente pensado para ellos, que incluye unos platos deliciosos, sanos, basados en productos de temporada y, por supuesto, sin gluten.

El restaurante La Sopa Boba se ha propuesto que esta semana los celíacos puedan comer fuera de casa sin tener que estudiarse a conciencia la carta para averiguar qué platos llevan o no llevan gluten. El chef Fernando Limón, al frente de los fogones de este establecimiento, ha preparado una selección de platos sin gluten, que serán incluidos en la carta desde hoy, lunes 21 de mayo, hasta el domingo 27. Entre las delicias que propone destacan:

• Bombón de berberechos en salsa verde

• Croquetas de langostinos

• Ensalada de algas con ceviche de zamburiñas

• Tarta tatín de manzana

Además, los platos habituales de la carta que no lleven gluten, serán destacados con un sello identificativo para que puedan ser distinguidos fácilmente.

Plato-interior — Los celíacos podrán degustar platos deliciosos sin necesidad de estudiarse detenidamente la carta.

Este restaurante de cocina de autor creativa y ocurrente se ha convertido en un lugar de referencia para los amantes de la gastronomía más alternativa. Comenzó su andadura en Villalba y recientemente se ha mudado al centro de Alpedrete. Eso sí, la esencia de la cocina ha permanecido intacta. Lo único que ha variado es la ubicación, que ha permitido renovar la estética del restaurante y crear un espacio más fresco y actual, también con terraza.

Este nuevo emplazamiento se ha convertido en el nuevo “centro de operaciones” de Fernando Limón, que practica una cocina atrevida, en la que destacan las carnes exóticas (como el solomillo de avestruz con salsa de arándanos o los lomitos de canguro al vino tinto), las combinaciones imaginativas (como la ensalada de pato y pulpo o la tarrina templada de pichón con cerezas y compota de tomate al jengibre), los postres divertidos (como los sorbetes con Peta-Zeta) y los licores más arriesgados (tienen un licor de regaliz de elaboración propia). Todo esto elaborado con mimo, originalidad y con materias primas de primera calidad.