Hacienda se ha quedado con las ganas. Nadie se presentó a la subasta de una tercera parte de la finca de Ambiciones.
Una historia muy difícil de entender ya que a quien persigue Hacienda es al padre de Jesulín por un impago de deudas cifrado en alrededor de 250.000 euros-y es lo que ha provocado que la finca Ambiciones, saliera a subasta. Pero la Agencia Tributaria ha tenido que declarar desierta la subasta del derecho de usufructo de un tercio de la finca que Jesús Janeiro tiene en la sierra de Cádiz.
Ahora se abre ahora un periodo de adjudicación directa de seis meses en el que este organismo oficial puede recibir ofertas.
La subasta se ha celebrado a pesar de que Jesulín de Ubrique había intentado que fuera declarada nula ya que, según su abogado, él habría acreditado que es “el verdadero y único titular de este derecho de usufructo”.

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